La desilusión, el aburrimiento, la falta de deseo, el agotamiento de un proyecto de vida en común, ponen sobre la mesa recriminaciones, reproches, reivindicaciones, interminables discusiones sobre quién hizo más por la relación o sobre quién es más culpable de la situación actual. Se podría decir que han despertado de un letargo rutinario, pero todavía no saben de qué sueño, a qué pesadilla."